
El PSM ha dado ya el visto bueno a la convocatoria y se espera que esta misma semana se concrete la fecha de celebración de una Asamblea (previsiblemente el jueves 10 de abril) en la que los afiliados podrán elegir a la nueva ejecutiva y al secretario local del partido.
Actualmente, el partido está dirigido por una gestora formada por cinco miembros de la ejecutiva regional del PSOE y otros miembros cercanos al alcalde, Rafael Gómez Montoya.
Cerca de dos años de continuas peticiones por parte del sector mayoritario de la Agrupación, encabezado por los concejales Santiago Llorente, Juan Antonio González, María José Banegas y Laura Oliva, por fin han dado sus frutos, si bien el detonante para que el Secretario General del PSM, Tomás Gómez, haya decidido finalmente dar vía libre al proceso de Leganés, ha sido otro.
Las intromisiones de Rafael Simancas en la labor de Gómez al frente del PSM han pesado, y mucho, en la decisión del alcalde de Parla. El ex líder de los socialistas madrileños, que `ni come ni deja´, se está dedicando a empañar el trabajo del nuevo PSM.
Antes de las pasadas elecciones generales, Simancas señalaba en un medio de comunicación madrileño, en referencia a la situación del Partido Socialista en la Comunidad que “ahora sólo tenemos un objetivo: que Zapatero sea el presidente del Gobierno. A partir de ahí se abrirá un nuevo proceso congresual ordinario y ya serán los militantes de Madrid los que tengan la última palabra”.
Hace unos días, Simancas publicaba un artículo en la Web de la Fundación Sistema, donde reflexionaba sobre los resultados del PSOE en Madrid en los comicios generales del 9M: “son malos resultados, que deben ser objeto de un análisis certero y deben ser respondidos con una estrategia inteligente, para su mejora en el horizonte del 2011. Hay tiempo y hay posibilidades”.
Es curioso, pero el responsable de uno de los mayores varapalos electorales del PSOE en la Comunidad de Madrid (que forzó su dimisión), se permite la licencia de seguir dictando cátedra sobre estrategia política en la región.
Está claro que Simancas sigue dando guerra y, evidentemente, su amigo Rafael Gómez Montoya le apoya. No olvidemos que el primero designó a su tocayo como candidato a la alcaldía de Leganés obviando el sentir de la Agrupación Socialista de Leganés, que solicitaba la celebración de Primarias para tal fin.