
Tanto Montoya como Calle estuvieron arropados por sus líderes regionales, pero eran ellos los grandes protagonistas. PSOE e IU estaban obligados a entenderse, a firmar esa moción de censura tras la que se esconde un pacto de gobierno que nadie conoce.
Un pacto de progreso, según Calle, de izquierdas, de futuro. ¿Está usted seguro? Discúlpeme, pero si dos formaciones no han sido capaces de ponerse de acuerdo en casi un mes para distribuirse las tareas para gobernar una ciudad, difícilmente podrán trabajar conjuntamente en el equipo de gobierno.
Además, seamos claros. Rafael Gómez Montoya y Raúl Calle no se `tragan´. Y esta situación se extiende entre sus bases. El pasado 16 de junio, con el bastón de mando en manos de Guadalupe Bragado, fuimos testigos de insultos y amagos de agresión entre miembros de dos partidos que hoy se abrazan. Evidentemente, el abrazo de Judas. Porque los mismos que se insultaban hoy miraban hacia otro lado. ¿Esto es política?.
El portavoz de IU fue el primero en hablar. Serenamente explicó que el pacto es fruto de "un acuerdo programático y consensuado por ambas partes para sacar adelante el proyecto de gobierno”. Políticamente correcto, no cabe duda.
Quien se `retrató´ el sólo en rueda de prensa fue el futuro alcalde. Yo mismo le formulé una pregunta que entiendo se siguen haciendo todos los vecinos de Leganés: “¿Qué ha cambiado desde el 16 de junio –día de la investidura de la actual alcaldesa- hasta hoy para que ahora haya pacto y ese día no?”.
No se pierdan la respuesta: “A mi juicio, eso ahora no es importante”. ¡Toma ya!. ¡Viva la transparencia!. El próximo alcalde de esta ciudad, Rafael Gómez Montoya, entiende que no es importante dar a conocer a los ciudadanos qué ha pasado con sus votos y cómo han jugado con la voluntad democrática de todo un municipio.
Minutos más tarde comparecía en rueda de prensa Guadalupe Bragado, a quien Montoya y Calle se han empeñado en `hacerla internacional´. La alcaldesa- arropada por el Secretario General del PP de Madrid, Francisco Granados- mantuvo un discurso previsible: “La moción de censura es un escándalo. PSOE e IU han instrumentalizado el Ayuntamiento, utilizándolo como moneda de cambio para sus intereses particulares".
El próximo 9 de julio, a partir de las 12.00 horas, el Pleno Municipal acabará con la breve andadura de Guadalupe Bragado como primer edil del Ayuntamiento de Leganés. El nuevo alcalde será Rafael Gómez Montoya. Bueno, eso es lo lógico, pero aquí ya puede pasar de todo.