martes, 26 de abril de 2011

De la Gran Vía a la gran valla

Es noticia hoy en Leganés la presentación ante los medios de comunicación del proyecto “estrella” del PSOE Leganés para su campaña electoral: La Gran Vía.


Una obra faraónica –arriesgadísima en el contexto de crisis económica actual- que nacerá a partir del futuro (y presunto) enterramiento de la línea de Cercanías C5. El objetivo es levantar un gran bulevar que, a modo de Gran Vía, conecte todos los barrios de la ciudad sobre el suelo resultante del soterramiento a su paso por el municipio.

Según el candidato socialista, Rafael Gómez Montoya, este proyecto, tan llamativo como utópico, cuenta con un presupuesto de 425 millones de euros, a los que hay que sumar los 500 que costará el enterramiento de la vía, “y generará 4.500 puestos de trabajo”.

De momento no ha habido reacciones… pero las habrá, ya lo verán. Porque esta propuesta “muy Gallardoniana” como me ha comentado un colega, no dejará a nadie indiferente. Y es que la idea es buena, muy buena, otra cosa es que las arcas municipales (por mucha autofinanciación que quieran vendernos) sea capaz de soportar el envite.

Y cerraba el títular del post haciendo mención a las vallas. Esos megapaneles publicitarios que rodean Leganés y que durante el mes de abril, al igual que los medios de comunicación, no pueden acoger propaganda electoral.

Esta misma semana me he encontrado, camino de casa, con una nueva vuelta de tuerca a lo que representamos los periodistas, los medios y las empresas editoras a escasos 26 días de la cita electoral.

Veo como –por primera vez en mucho tiempo- los periódicos se convierten en escaparate propagandístico a través de soportes muy distintos al papel de 60 gramos o a la pantalla de ordenador.

Les enseño ejemplos en vallas de carretera aunque también podrán ver soportes en Metrosur, e incluso me consta que ha existido un fallido intento en autobuses interurbanos.

No sé si esto es bueno o malo, pero demuestra que la línea que separa periodismo y política cada vez es más difusa. Vean y cuéntenme cosas.


Edito hoy, miércoles, a las 9.25 horas. Como les avisé ayer, ya ha habido reacciones. Les dejo enlace.

martes, 19 de abril de 2011

Disciplina política

Si hay algo que admiro del Partido Popular es su disciplina. Hablamos de un partido estructurado en base a una línea recta donde no cabe pisar fuera y pobre de quien ose hacerlo. Son disciplinados sus dirigentes, sus cargos públicos, sus afiliados pero también sus votantes.


Leganés es una clara extensión de esta estructura jerárquica. Desde que la presidenta del Partido Popular en Madrid, Esperanza Aguirre, decidió nombrar valido (sí, no lleva tilde) a Jesús Gómez Ruiz, el ahora candidato ha ejercido –en ocasiones desde la distancia- un ferreo control del aparato y del Grupo municipal dejando un reguero de difuntos políticos que asusta.

El último damnificado ha sido Diego Alhambra. ¡Quién se lo iba a decir hace apenas unos meses!. Alhambra ha pasado de llevarle los trastos al jefe a convertirse en un auténtico trasto, pero viejo. Y lo llamativo de todo este asunto es que el afectado se encuentra desde entonces apagado o fuera de cobertura. Él, acostumbrado a notables estridencias verbales, ha hecho honor a esa disciplina impuesta por los populares haciendo mutis por el foro.

Y así funciona el PP. Te mato y punto (políticamente hablando). Aquí no caben debates internos ni llamadas a Génova ni monsergas. Uno manda y los demás acatan. Se acabó.

Lo mismito les pasó a Eva María de la Fuente, Mario Avilés, Eduardo Jiménez, José Luis Salazar…

Y digo que los votantes también acatan en parte este rol porque la abstención no va con ellos. El próximo 22 de mayo, a más de uno y más de dos descontentos con la gestión de Jesús Gómez el cuerpo les pide quedarse en casa. Sin embargo, irán a votar aunque favorezcan a alguien que perjudicó sus intereses. Porque para ellos, por encima de todo está el partido.

¿Pueden decir todos lo mismo?

martes, 12 de abril de 2011

El PP de Leganés ya tiene su lista

El Partido Popular de Leganés presenta mañana miércoles su candidatura a las próximas elecciones municipales. El Centro Cultural Las Dehesillas acogerá el acto de presentación de los 26 nombres que acompañarán a Jesús Gómez en su intento por gobernar en Leganés.

Antes, esta misma tarde, el Comité Electoral Regional del PP deberá aprobar la lista remitida por el presidente local, una lista de la que se caen siete de los doce actuales concejales de la Corporación.

Sin duda, la gran sorpresa de esta lista será la ausencia de Diego Alhambra, uno de los más estrechos colaboradores del portavoz Jesús Gómez durante la presente legislatura.

Fuentes populares han señalado que la salida del que hasta hoy estaba catalogado como hombre fuerte del candidato popular responde a motivos personales.

En esa candidatura estarán, por este orden, los ediles Jesús Gómez, María Dolores Montoro, Beatriz Alonso, Juan Carlos Cenamor y Noemí Selas (esta última en el número 12). Se caen por lo tanto por razones obvias Eduardo Jiménez, Eva María de la Fuente, Mario Avilés, Ángel Largo, José Luis Salazar, Raquel Arellano y el propio Alhambra.

Entran en esa lista Alejandro Martín, Miguel Ángel Recuenco y Juan Manuel Álamo, en sus puestos más altos, quedando como sigue:

1.- Jesús Gómez
2.- Alejandro Martín
3.- Miguel Ángel Recuenco
4.- María Dolores Montoro
5.- Beatriz Alonso
6.- Juan Manuel Álamo
7.- Javier De Diego
8.- Concepción Pastor
9.- Beatriz Tejero
10.- Juan Carlos Cenamor
11.- Ángel Juarez
12.- Noemí Selas
13.- David Alonso
14.- Verónica Moro

sábado, 9 de abril de 2011

Crónicas preelectorales II

Los candidatos de Leganés han decidido salir a la calle para mostrar sus propuestas. Una galería comercial de las de toda la vida y las bocas de Metrosur y Renfe son, por ahora, los escenarios estrella.

Sin embargo, en estos días me quedo con la sensación de que algo se está cociendo a nivel interno en las casas de algunos de ellos. En el PP, la filtración amistosa de los seis primeros puestos de la lista no ha sentado nada bien (literal) a algún destacado fontanero, que esperaba ir más arriba.

Sin embargo, Jesús Gómez ha premiado a sus más fieles colaboradores en los últimos meses. Aquellos que le han animado, apoyado y redactado los requerimientos judiciales en las que ha basado su estrategia de oposición. Esos que le dicen al oído que “ni un paso atrás” o que le han señalado la judicialización de la vida política como el camino a Plaza Mayor.

Supongo que Gómez estará al tanto de que uno de los ex ediles que le acompañarán en su lista acabó siendo muy indisciplinado con el Grupo municipal popular allá por el año 2007. Ya les contaré.

En frente, el alcalde se ha decidido por fin a entrar en campaña y ahora, lo que son las cosas, le veo más unido a las siglas que a la institución.  Los suyos dicen que la cosa no está tan mal y que habrá pelea hasta el final.

La misma sensación tienen los populares. Desde Génova ya les han dicho que no se confíen porque tenían mejores resultados hace unos meses. Aún así, están a tiro de piedra, o mejor dicho de notario.

Los mismos datos confirman la consolidación del voto de Izquierda Unida. Curiosamente (y esto no lo digo yo) las portadas que algún medio de comunicación han dedicado a esta formación en las últimas semanas han tenido un efecto rebote consiguiendo movilizar al votante de IU.

Y es que los periodistas, los medios, las empresas editoriales, a menudo nos obsesionamos en intentar “atrapar al palomo” de uno u otro signo político sin percatarnos de que acabamos por convertir en mártir a más de uno, provocando un efecto contrario en el lector, que termina por etiquetar al medio, salvando y exculpando al protagonista de tanta noticia turbia.

Cierro con ULEG, que presentó esta tarde su candidatura. Me quedo con las palabras de su número 2, Ricardo López, quien ha señalado que en ese partido “no hay malos rollos entre nosotros, díscolos o ramas”. Hombre, muy pronto empezaríais a pegaros, pero tampoco lo descartes si algún día os toca repartir.